Con las reglas mnemotécnicas preparar unas oposiciones dejara de ser un reto y lo podrás superar fácilmente. Muchos opositores tienen problemas para recordar tanta información, pero los que tienen éxito aplican trucos que facilitan el estudio y ayudan a retener mejor lo aprendido. Aquí te mostramos 7 técnicas súper efectivas para memorizar sin tanto esfuerzo.
Las 7 reglas mnemotecnias imprescindibles que los opositores más exitosos usan.
1. Usa frases fáciles de recordar
Un truco muy útil y usado en las reglas mnemotécnicas es crear frases con las iniciales de lo que necesitas aprender. Por ejemplo, para recordar los planetas del sistema solar en orden, puedes usar la frase «Mi Vieja Tía Marta Jamás Supo Usar Ningún Paraguas» (Mercurio, Venus, Tierra, Marte, Júpiter, Saturno, Urano, Neptuno, Plutón). Aplica este método a leyes, listas y procesos en tu temario.
2. Asocia ideas con imágenes
Nuestro cerebro recuerda mejor las imágenes que los textos. Convierte los conceptos complicados en dibujos mentales llamativos y hasta graciosos. Cuanto más exagerada sea la imagen, mejor se fijará en tu memoria.
3. Conéctalo con lugares que conoces
Este truco consiste en relacionar lo que debes aprender con lugares familiares. Por ejemplo, si tienes que recordar varios artículos de una ley, imagina que cada habitación de tu casa representa uno y pon objetos imaginarios que te recuerden su contenido.
4. Crea historias divertidas
Otra reglas mnemotécnicas es relacionar pequeñas historias usando los conceptos que necesitas recordar. Una historia bien hecha ayuda a que la información se quede grabada en tu cabeza y sea más fácil de conectar con otras ideas.
5. Agrupa la información en bloques
Organizar la información en grupos pequeños hace que sea más fácil de recordar. Por ejemplo, si tienes que memorizar un número largo como 199520052022, divídelo en partes: 1995 – 2005 – 2022. Esto también sirve para leyes, fechas y datos históricos.
6. Repite poco a poco y con descansos
Para que la información pase a tu memoria a largo plazo, repásala en diferentes momentos. No intentes estudiarlo todo de golpe en un solo día; es mejor repasar un poco hoy, otro poco mañana y así sucesivamente.
7. Escucha tu propia voz
Graba tu voz explicando los conceptos clave y escúchalos mientras caminas, cocinas o haces ejercicio. La repetición auditiva refuerza lo aprendido y te ayuda a recordarlo sin mucho esfuerzo.
Aplicar estos trucos mnemotécnicos puede marcar la diferencia entre aprobar y quedarte en el camino. No se trata de estudiar más horas, sino de estudiar con inteligencia. Prueba estas técnicas y verás cómo tu memoria mejora sin tanto estrés. ¡Tu plaza está más cerca de lo que piensas!